El Gobierno de Colombia confirmó el retorno del colombiano liberado en Gaza, Elkana Bohbot, tras dos años de cautiverio en manos de Hamás. Su liberación se produjo en el marco del reciente acuerdo de paz alcanzado entre Israel y el grupo palestino, mediado por Qatar, Egipto, Turquía y Estados Unidos.
El presidente Gustavo Petro, en nombre del Gobierno colombiano, expresó su gratitud a los países mediadores por facilitar el intercambio de prisioneros y la entrada de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza. En el comunicado oficial, el Ejecutivo celebró la noticia del colombiano liberado en Gaza y reiteró su disposición a seguir colaborando en los esfuerzos internacionales para la paz en Medio Oriente.
Un reencuentro que conmovó a Israel
El momento del reencuentro de Elkana Bohbot con su familia fue captado en video y se ha difundido ampliamente en redes sociales. En las imágenes, se observa a sus familiares entrando a la habitación donde él los esperaba. Su madre, entre llantos y abrazos, lo llama “hijo mío” y le recuerda que ese día coincidía con su cumpleaños hebreo, convirtiendo la escena en un símbolo de vida y renacimiento.
Las risas y expresiones de alivio marcan el final de un largo periodo de incertidumbre. El clip, difundido por medios israelíes, ha sido descrito como uno de los momentos más emotivos tras la entrada en vigor del acuerdo. Para muchos, la imagen del colombiano liberado en Gaza abrazando a su madre representa el rostro humano de un conflicto que ha dejado profundas cicatrices.
Dos años de cautiverio y esperanza
Elkana Bohbot, de 35 años, trabajaba en una heladería en Tel Aviv y fue secuestrado el 7 de octubre de 2023 durante el festival de música Nova, cuando intentaba evacuar a heridos en medio del ataque perpetrado por Hamás. Desde entonces, su esposa, la colombiana Rebecca González, emprendió una intensa campaña internacional para exigir su liberación.
Durante su cautiverio, Bohbot apareció en un video difundido por Hamás junto a otro rehén, Yossef-Haïm Ohana, describiendo las condiciones críticas en las que se encontraban. Aquella grabación fue considerada por las autoridades como una prueba de vida, y avivó las esperanzas de que el colombiano liberado en Gaza pudiera regresar con vida.

Su esposa relató a medios como Blu Radio la angustia de esos meses y el deseo de su hijo, de apenas cinco años, que cada cumpleaños pedía como regalo el regreso de su padre. “Si mi esposo está vivo, yo tengo que seguir luchando”, dijo González en una de sus entrevistas, reflejando la fortaleza que sostuvo la campaña.
El papel de Colombia en el proceso
El Gobierno colombiano jugó un papel silencioso pero constante en la búsqueda de soluciones diplomáticas. La Cancillería mantuvo contacto permanente con los familiares y con los mediadores internacionales, logrando que el caso de Bohbot fuera incluido en las listas humanitarias de intercambio.
El comunicado oficial no solo celebró la liberación del colombiano liberado en Gaza, sino también la de más de 1.700 palestinos detenidos y la devolución de cientos de cuerpos retenidos por Israel. Sin embargo, también condenó la deportación forzada de 154 palestinos liberados, e hizo un llamado urgente al respeto de los derechos humanos y al fin de la ocupación.
Una historia que simboliza el anhelo de paz
La liberación de Elkana Bohbot se produce en el contexto del acuerdo de paz impulsado por el presidente estadounidense Donald Trump, respaldado por las principales potencias regionales. Este pacto prevé la entrega de todos los rehenes vivos, el retiro progresivo de las tropas israelíes de Gaza y el inicio de un proceso de reconstrucción bajo supervisión internacional.
Para Colombia, el caso de Bohbot no solo marca el cierre de una historia de dolor, sino también una reafirmación de su compromiso con la diplomacia y los derechos humanos. El colombiano liberado en Gaza se ha convertido en un símbolo de resistencia, fe y esperanza en medio de uno de los conflictos más prolongados del siglo XXI.