Durante millones de años, la rotación de la Tierra ha marcado el ritmo de nuestras vidas. Sin embargo, en julio de 2025, algo inusual volverá a ocurrir: el segundo día más corto de la historia. El 22 de julio, nuestro planeta completará un giro completo en 1,34 milisegundos menos que las 24 horas tradicionales, según estimaciones recientes confirmadas por Time and Date y Europa Press.
Aunque parezca una fracción imperceptible, este fenómeno forma parte de una extraña y continua tendencia en la que la Tierra ha estado girando cada vez más rápido desde el año 2020. La razón de esta aceleración sigue siendo un misterio para la ciencia, pero los datos confirman que estamos ante uno de los eventos más curiosos de nuestro tiempo.
¿Qué está pasando con la rotación de la Tierra?
La duración exacta de un día se mide en lo que se conoce como “Longitud del Día” (LOD, por sus siglas en inglés), un cálculo que determina cuánto se desvía cada rotación terrestre del estándar de 86.400 segundos (24 horas). Estas pequeñas variaciones, de apenas milisegundos, sólo pueden ser detectadas mediante relojes atómicos de alta precisión.
Hasta 2020, el récord del día más corto era de -1,05 ms, pero desde entonces la Tierra ha roto su propio récord casi cada año. El punto máximo llegó el 5 de julio de 2024, cuando el planeta rotó 1,66 milisegundos más rápido de lo habitual.
Esta aceleración ha desconcertado a los científicos, ya que se aparta de la tendencia natural de la Tierra a girar más lentamente con el tiempo debido al efecto de las mareas lunares.
Fechas clave y cifras: ¿cuándo serán los días más cortos de 2025?
En 2025, se han identificado tres fechas como las más propensas a registrar los días más cortos del año: el 9 y el 22 de julio, y el 5 de agosto. De todas ellas, el 10 de julio fue confirmado recientemente como el día más corto del año con una reducción de 1,36 milisegundos.
El 22 de julio ocupará el segundo lugar, con 1,34 milisegundos menos que un día promedio. Aunque parezca poco, se trata de una anomalía significativa si se considera el comportamiento histórico del planeta.
Este patrón coincide con la posición de la Luna respecto al ecuador terrestre, que influye directamente en la velocidad rotacional de la Tierra. Cuando la Luna está más alejada del plano ecuatorial, la Tierra tiende a girar más rápido.
Posibles causas: ¿por qué gira más rápido la Tierra?
No existe una respuesta definitiva. Los científicos consideran que hay una combinación de factores internos y externos que podrían estar provocando este fenómeno. Entre ellos se encuentran las interacciones del núcleo líquido de la Tierra con el manto, las variaciones en la atmósfera y los cambios en la distribución de masas en el planeta.
Un estudio reciente incluso sugiere que el deshielo polar y el aumento del nivel del mar estarían redistribuyendo el peso del planeta de forma que podría estar influyendo en su rotación. No obstante, algunos expertos consideran que este factor podría estar amortiguando la aceleración y no provocándola directamente.
Leonid Zotov, especialista en rotación terrestre de la Universidad Estatal de Moscú, declaró que “la causa de esta aceleración no se explica”, sugiriendo que el origen probablemente se encuentre en el interior del planeta. Algo similar a lo que ya exploramos cuando surgió el debate sobre si el núcleo de la Tierra se había detenido, dejando claro que todavía sabemos muy poco sobre el comportamiento interno del planeta.
¿Puede afectar a los GPS y otras tecnologías?
Aunque 1,34 milisegundos parezca insignificante, incluso estas pequeñas variaciones pueden tener implicaciones técnicas. Los sistemas de posicionamiento global (GPS), por ejemplo, dependen de una sincronización perfecta con relojes atómicos para calcular posiciones con precisión milimétrica.
Una aceleración constante podría forzar ajustes en estos sistemas, o incluso motivar la implementación de un segundo intercalar negativo: es decir, restar un segundo completo al reloj universal coordinado (UTC). Esto nunca se ha hecho antes y presenta retos para la infraestructura digital.
Redes eléctricas, plataformas financieras y telecomunicaciones son otras áreas sensibles a los cambios de tiempo. Por ahora, no hay impacto directo, pero los expertos están atentos a los patrones.
¿Y qué significa todo esto para nosotros?
La rotación de la Tierra no es algo que percibamos a simple vista, pero su precisión es fundamental para el funcionamiento del mundo moderno. El hecho de que esté cambiando de forma tan inusual nos recuerda que el planeta es mucho más complejo de lo que creemos.
Aunque no hay consecuencias inmediatas para la vida diaria, estos fenómenos podrían requerir ajustes técnicos en los próximos años. Incluso podrían cambiar cómo medimos el tiempo si se confirma una aceleración sostenida.
Referencias
Time and Date
Europa Press